las grandes religiones surgen de entre los pobres, como una construcción psicológica que tiene por fin conferirle a la carga abrumadora de cumplir la función de material de escombro sobre la que se asienta toda sociedad un cierto matiz de dignidad. Con el tiempo los ricos echan en falta esta especie de dignidad en sus personas y terminan por adueñarse de la religión también

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y nadie puede adueñarse de quien no tiene 'religión'. No hay nada religable, usable para manipular.

Archivo del blog