Años, años que se me fueron, resultó que perseguía sombras, lo que amaba era incorpóreo, esperaba reciprocidad pero solo adquirí paciencia.  Esperé.  Escuche el tintineo de cerrojos que cedían, pero no intenté abrir las puertas porque yo solo sabía esperar.

Amar la vida hoy y ahora, con todos y cada uno de sus retazos y fragmentos, vivir, amar vivir.  Ya no puedo postergar el vivir, no, ya no más.  No más planes, esta vez improvisaré.

No hay comentarios:

Archivo del blog